Un sueño olvidado por la guerra
Era de noche, estaba con papá, mamá y mis hermanos. Aquel día éramos felices, jugábamos y esperábamos el anochecer para el siguiente día regresar a la escuela y encontrarme con mis amigos; cerré los ojos para soñar, en aquel sueño visualizaba una estrella fugaz y cogido de la mano de mi hermano menor le dije con tanta alegría: mira! una estrella fugaz, pide un deseo! Aquella estrella fue tan luminosa, contenía un fuego radiante, esa noche al caer la estrella fugaz resonó un estallido tan fuerte que parecía un concierto de misiles, cogí a mis hermanos y les dije: no se asusten es solo el ruido de los cohetes que se alistan para la fiesta.
Desperté y me di cuenta que no era un sueño, todo era real. Mis padres por protegernos se convirtieron en ángeles. Yo me encontraba muy asustado, pero al ver a mis hermanos algo dentro de mí, me impulsaba a ser fuerte. Les decía calma hermanos papá y mamá nos protegen, imaginemos que es un juego de las escondidas, debemos buscar un lugar donde escondernos para que no nos encuentren. Mi hermano pequeño sangraba de una pierna al pedir ayuda, rompieron su pantalón para vendarlo, miré su pantalón, aquel pantalón que nuestra madre había comprado un día antes, veía correr mucha gente, las calles eran como charcos de sangre, muchas personas lloraban de manera desconsolada al ver a sus seres queridos dormidos en un sueño profundo. Las estrellas seguían cayendo no había quien nos defienda y proteja ante esas grandes luces, el ruido era fuerte y nadie los silenciaba. Nuestras lágrimas y gritos se silenciaban, se volvían nada ante tanto ruido, nadie nos escuchaba; muchas personas decían que era una guerra, pero yo no creía porque somos seres humanos como todos los que viven en este mundo.
El tiempo ha pasado y me pregunto: ¿Por qué las guerras? ¿Qué pasa con la humanidad? Acaso la respuesta a todo esto es: solo ganar una apuesta de decir: yo tengo más poder y soy más fuerte o es que nosotros somos la pieza del juego para ganar dicha apuesta. Solo le pido a Dios, crear conciencia del valor de la vida y que él sea el comunicador hacia una vida pacífica, sin odios ni asesinatos de vidas inocentes.
Written by: Yana F. Alvarado Mio.
Desperté y me di cuenta que no era un sueño, todo era real. Mis padres por protegernos se convirtieron en ángeles. Yo me encontraba muy asustado, pero al ver a mis hermanos algo dentro de mí, me impulsaba a ser fuerte. Les decía calma hermanos papá y mamá nos protegen, imaginemos que es un juego de las escondidas, debemos buscar un lugar donde escondernos para que no nos encuentren. Mi hermano pequeño sangraba de una pierna al pedir ayuda, rompieron su pantalón para vendarlo, miré su pantalón, aquel pantalón que nuestra madre había comprado un día antes, veía correr mucha gente, las calles eran como charcos de sangre, muchas personas lloraban de manera desconsolada al ver a sus seres queridos dormidos en un sueño profundo. Las estrellas seguían cayendo no había quien nos defienda y proteja ante esas grandes luces, el ruido era fuerte y nadie los silenciaba. Nuestras lágrimas y gritos se silenciaban, se volvían nada ante tanto ruido, nadie nos escuchaba; muchas personas decían que era una guerra, pero yo no creía porque somos seres humanos como todos los que viven en este mundo.
El tiempo ha pasado y me pregunto: ¿Por qué las guerras? ¿Qué pasa con la humanidad? Acaso la respuesta a todo esto es: solo ganar una apuesta de decir: yo tengo más poder y soy más fuerte o es que nosotros somos la pieza del juego para ganar dicha apuesta. Solo le pido a Dios, crear conciencia del valor de la vida y que él sea el comunicador hacia una vida pacífica, sin odios ni asesinatos de vidas inocentes.
“Los niños que sufren los ataques de las guerras, también tienen y guardan sueños”
Written by: Yana F. Alvarado Mio.
Muy buen articulo!!! me gusta !! ¿por qué las guerras? por qué tanta desgracia? qué pasa con la humanidad? son preguntas legítimas. Nacimos y crecimos escuchando a nuestros abuelos y papas que nos hablaban de la maldad, las guerras que causan el hambre y crisis de todo tipo, y otros tipos de desgracia... Tal vez pensaban ellos que nosotros sus hij@s seríamos l@s primer@s en vivir la realizacion del sueño (vivir en paz) tan grande que ha tenido toda la humanidad a lo largo de su historia. Pero han pasado años y nada cambia. Nuestros abuelos y algunos nuestros papas han muerto sin vernos en paz. Algunos de nosotros también se han ido de este mundo sin ver ese sueño hacerse realidad. Y nosotros??? Ya vamos a envejecer... y vemos que la situacion se pone cada vez más complicada. y seguimos preguntandonos: ¿hasta cuando las guerras y la muerte de inocentes? Pero en medio de esas maldades, hay un sueño (esperanza) que sigue luciendo en el rincón de nuestro corazon. Confiemos en Dios!!!
ResponderBorrarasí es estimado Seraphin aun hay esperanzas, por eso debemos ayudar a las personas a ser consientes de sus actos y más que eso a ser misericordiosos con los demás. Gracias por tu comentario querido amigo!
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